Tuesday, January 16, 2007
RENUNCIA POLEMICO ARZOBISPO POLACO DE VARSOVIA
Al arzobispo de Varsovia, Stanislaw Wielgus ha estado en medio de una gran polémica ya que admitió recientemente que había colaborado con la antigua policía secreta de la era comunista en Polonia.
El arzobispo polaco debería haber asumido su cargo en una misa especial en la que se esperaba la presencia del Presidente de Polonia.
El comunicado de
Se estima por los observadores, que la decisión de detener la asunción del cargo por parte de un obispo en una etapa tan tardía es algo sin precedentes.
El pasado viernes, el arzobispo Wielgus había sido consagrado en una ceremonia a puerta cerrada. Sin embargo, admitió su colaboración y en un comunicado reconocía que no había sido completamente sincero al respecto, el que fue leído el sábado en los templos polacos.
POLEMICO ARZOBISPO
La designación de Wielgus ha sido descrita como la principal crisis de la iglesia polaca en tiempos recientes.
La decisión de nombrar a Wielgus dividió a la opinión en un país fervientemente católico. Una encuesta reveló que dos tercios de las personas consultadas expresaron que Wielgus debería renunciar. La admisión sobre su pasado se dio después de que una comisión de
El arzobispo dijo que había tenido contacto con agentes de seguridad, pero negó haber dado información sobre los sacerdotes. Agregó que los documentos que sugerían lo contrario fueron presentados solamente por “funcionarios” comunistas.
El religioso también aceptó que sus negativas previas a reconocer la cooperación le habían hecho daño a
Dijo apenas que se vio enredado con la policía secreta comunista durante su juventud, pues quería promover su carrera académica. Repitió que no había denunciado no intentado causar daño a nadie.
Sin embargo, una comisión de
El Papa Benedicto XVI había hecho la designación en diciembre. Poco antes de Navidad, el Vaticano expidió un comunicado en el que insistía que el Papa había sido plenamente informado acerca del pasado de Wielgus y que apoyaba su designación.
No onstante, los historiadores calculan que hasta un 15% de la clerecía polaca informó sobre sus colegas durante la era comunista.