Wednesday, July 05, 2006
GOBIERNO DE IRAK OFRECE PLAN DE RECONCILIACION NACIONAL

El Primer Ministro de Irak, Nuri al-Maliki, presentó al Parlamento un plan de 24 puntos, en el cual se ofrece amnistía a parte de los insurgentes, pero no a aquellos miembros de organizaciones tales como Al Qaeda, que han atacado a civiles.
Mediante esta propuesta, el gobierno intenta desarmar a las milicias, integrar al sistema político a los insurgentes que no han cometido crímenes graves y también, iniciar un diálogo con grupos rebeldes sunitas.
Se planteó la revisión de la situación de los miembros del Partido Baaz de Saddam Hussein, que fueron retirados del poder, después de la invasión de los estadounidenses. El primer ministro insistió que su gobierno seguirá en la lucha contra el terrorismo, por todos los medios.
Su iniciativa ha contado con el apoyo del líder de la mayoría sunita en el Parlamento, Adnan al-Dulaimi, quien ha llamado a los iraquíes a unirse en los esfuerzos de reconstrucción del país. Solicitó, además, al gobierno, que ponga en práctica una rápida liberación de detenidos y el término de ataques contra los civiles.
El Presidente del Parlamento expresó, que la propuesta no es una solución mágica, sino un intento de tapar las grietas que dividen Irak, declarando a una cadena de televisión, que el gobierno está comprometido a acercar a la mesa a todas las facciones y a implementar una reconciliación nacional entre ellas.
Algunos legisladores estiman que la propuesta sólo funcionará si se le extiende la amnistía a la mayor cantidad de grupos posible.
ESTRATEGIA MAYOR
El plan de reconciliación propuesto por el primer ministro iraquí, para algunos, es parte de un gran plan del gobierno de Bush para estabilizar a Irak.
Otras partes del plan incluyen insistir en que Irak es ahora una democracia y que hay que apoyarla y que por otra parte, es imposible establecer una fecha o un cronograma de salida de las tropas de EE.UU., ya que esto sería una muestra de debilidad.
La principal debilidad del plan presentado por el ministro iraquí, es que no contempla un cronograma para la salida de las tropas extranjeras y este es el punto que más interesa a los insurgentes nacionalistas y es algo que Malik no puede ofrecer. En lugar de eso, lo que se hará es pedirle al Parlamento que ponga una fecha para cuando Irak asuma el control del país y esto puede tomar un tiempo.
En EE.UU., los republicanos tuvieron una victoria política en el Senado, al rechazar una propuesta demócrata para fijar un calendario de retirada de las tropas.
Para aquellos estadounidenses que están preocupados por la presencia continua en Irak, se comenzó a hablar, que el general a cargo de ese país, George Casey, ya tendría un plan de salida.
De acuerdo a ello, hacia fines de 2.007 debería haber una fuerte reducción de tropas en Irak.
La estrategia combinada de reconciliación en Irak y la posibilidad futura de reducción de tropas en un futuro cercano, para algunos analistas, es lo que la administración Bush espera que sirva como fórmula ganadora para las elecciones de noviembre.